tres por una

Como puede cambiar tanto un género de un ejemplo a otro.

Es lo que me puse a pensar el otro día mientras veía Mientras Somos Jóvenes y luego la comparaba con títulos como Mortdecai y Spy. Todas obedecen al género de la comedia, pero con matices y objetivos claramente diferentes, y por lo mismo no es fácil ponerlas todas en un mismo saco de buenas a primeras.

En el primer caso, Josh (Ben Stiller) y Cornelia (Naomi Watts) son una pareja de cuarentones que podríamos calificar como bo-bo’s (burgueses bohemios, esas familias de clase media alta más cerca del entorno intelectual). Ambos son documentalistas, el guionista y director, ella productora, y Josh lleva largos años entrevistando a un intelectual en un documental que aún no consigue acabar. Con un instinto paternal igual a 0, la pareja se siente cada vez más lejos de sus amigos contemporáneos, todos ya con hijos o vidas más o menos encaminadas, no tardan en enganchar con Jamie (Adam Driver) y Darby (Amanda Seyfried) una pareja de veinteañeros hipsters, donde él también quiere ser documentalista, fabrican helados artesanales, coleccionan películas en vhs, andan en bicicleta, crian gallinas dentro de su loft y no ocupan redes sociales.

La segunda de ellas nos muestra al excéntrico heredero Mortdecai (Johnny Depp) un aristócrata especialista en arte, cuya fortuna, así como su matrimonio con Johanna empieza a hacer aguas. Mientras cranea como recuperar sus fondos, es contactado por un antiguo compañero de estudios Martland (Ewan McGregor), ahora convertido en agente del servicio secreto, quien investiga el crimen de una conocida curadora de arte y el robo de una valiosa pintura, quien requiere de Mortdecai sus conocimientos en la materia para dar con el paradero de la obra.

Y en la última, Susan Cooper (Melissa McCarthy) trabaja en la CIA como asesora a distancia de agentes de campo, formando un gran equipo con Bradley Fine (Jude Law), el agente estrella de la organización. Cuando Fine cae en una misión a manos de la contrabandista Rayna Boyanov (Rose Byrne), siendo Susan quien mejor conocía del caso, la organización le asigna para dar con el paradero de la sospechosa.

Los tres títulos cuentan con buenos castings, no son tan largas y son relativamente claras en su exposición, buscan un mismo objetivo, pero recurriendo a medios claramente diferentes.

Porque donde Mortdecai y Spy buscan una risa simple y sin más trámite (para la risa fácil está Adam Sandler y toda esa colección de comedias desechables que se conciben en los intestinos) Mientras…no deja en claro a quien está embromando.

¿Es a la pareja de cuarentones que se sienten pollos en corral ajeno en su propio entorno y que no tienen claro todavía donde y a qué quieren llegar? ¿De la pareja de hipsters que sienten que no tener internet en la casa y ver en una tele con pantalla honda los hace mejores personas? ¿Del espectador que se compró el cuento de que una película como ésta lo iba a convertir en alguien especial? No queda claro, y no es primera vez que una película de Noah Bambauch (The Squid and The Whale, 2005) me deja esa sensación de que no le basta con complicar la existencia de sus protagonistas, sino también la de sus espectadores.

Y eso que estamos ante la mejor actuación que le he visto a Ben Stiller, que en algún minuto de la década pasada era uno de mis actores de cabecera, y que se aleja de las horribles cintas que ha protagonizado el último par de años, y me encanta Naomi Watts. Mientras Somos Jóvenes no es una mala película, pero queda la sensación de que buscando algo que la hiciera trascender, Bambauch perdió la mira.

Como dije, Mortdecai y Spy son más sinceras en sus intenciones, lo que simplifica enormemente el camino que deciden recorrer y ser más eficaz en su desempeño. Como dije antes no buscan la risotada fácil de baño (esas películas que los zorrones comentan en sus juntas porque para disfrutarlas hay que tener el cerebro de un chicharrón hecho aún más añicos por tanta cerveza) tienen un argumento simple pero nada de tonto, bastante lógicos incluso, y narrado con la suficiente aptitud para que ambos trabajos resulten atractivos y amenos de seguir. Aunque en ese caso, Spy resulta un filme más parejo en su ritmo y timing, principalmente por la propia inexperiencia del realizador David Koepp frente a un Paul Feig con más tiempo dedicado al género (y bien dedicados, como nos demuestra su gran clásico, Bridesmaids, de 2011).

El Mortdecai encarnado por Johnny Depp, si bien es el enésimo clon que hace de Jack Sparrow en los últimos años, no es para nada asesinable. A su vez, Melissa McCarthy es una de las comediantas más populares de la actualidad, pero tiene la virtud de no hacer reír con lo que podría resultar obvio. Si, su personaje es torpe, su físico no le ayuda mucho y su actitud no es buena precisamente, pero por lo menos no llega a los extremos de avergonzarse a sí misma hasta lo indigno (como le pasa mucho a ciertos graciosillos actualmente), apoyada además por un buen elenco de secundarios (Jude Law y Rose Byrne desenvolviéndose cada vez mejor en un ambiente en que no han incurrido mucho, lo mismo Jason Statham, sorprendente en un personaje que se burla descaradamente de sus roles habituales, y el cada vez más requerido Bobby Cannavale).

Como pasa casi siempre, menos ha sido más, y donde Bambauch le quita los méritos a su propia obra con sus pretensiones de filmar una película tremenda, quedando en el intento, Mortdecai y sobre todo Spy no se cabecean mucho y consiguen hacer pasar un buen rato. Las tres películas obtienen la misma nota, pero una de ellas con la sensación de que pudo haber sacado más, las otras dos con el sentimiento de que pudo haber sido harto menos. En un caso, decepción, en el otro, algo parecido al agrado.

(de hecho, me acabo de enterar que Feig y McCarthy están detrás de la tercera parte de Ghostbusters…y ya no me pareció tan mala idea).

*** WHILE WE’RE YOUNG

Director: Noah Bambauch

Intérpretes: Ben Stiller; Naomi Watts; Adam Brody; Amanda Seyfried; Charles Grodin

Comedia dramática

2014

*** MORTDECAI

Director: David Koepp

Intérpretes: Johnny Depp; Gwyneth Paltrow; Ewan McGregor; Paul Bettany; Olivia Munn

Comedia

2015

*** SPY

Director: Paul Feig

Intérprete: Melissa McCarthy; Jude Law; Rose Byrne; Jason Statham; Bobby Cannavale

Comedia

2015

fretamalt@hotmail.com @panchocinepata

como conocí tu sitcom

2045.

Niños, les conté que me gustaba escribir sobre series y películas en algo que ustedes han revisado seguramente en los libros de historia. Se llamaban blogs…y un día de 2015 decidí escribir esto:

Sí, lo sé. Llegué tarde.

Si, sé que terminó hace más de un año.

Si, sé que en la actualidad existen cosas como House of Cards, Orange Is The New Black, The Strain, Daredevil (que es la única de todas estas que de verdad he tenido ganas de ver y he visto), The Walking Dead (le está pasando a TWD lo mismo que a Lost tras la cuarta temporada, es decir, sufriendo las consecuencias de ser artificialmente alargada?) y, por supuesto, Game Of Thrones.

Pero ¿que quieren que les diga? La serie que me ha tenido más que pegado en la última temporada fue una sitcom cuyo último capítulo salió al aire hace un año y algunos meses. Por una cuestión de sintonía nada más.

Porque How I Met Your Mother me resultó una experiencia mucho más cercana que todas las otras series enumeradas. Y llegó como las grandes cosas de la vida, por casualidad. A bordo de un bus a Viña del Mar, en uno de nuestros habituales viajes que con @Alexa_Wolf hacemos a nuestro segundo hogar.

Tenía referencias de la serie porque junto con The Big Bang Theory pasó la última década disputándose el trono de las sitcoms sobre grupos de amigos desocupado por Friends en 2004. Y por los miles de memes y virales que han salido con ítems relacionados a la serie y que circulan por ahí (true story, challenge accepted, en fin). Así que le dimos la oportunidad. Y nos enganchó. Cuando volvimos a casa y nos dimos cuenta que estaba en Netflix hasta la temporada 8 nos dijimos que una vez terminadas las temporadas vigentes de las otras series que estábamos viendo, le daríamos curso.

Y así fue. Por al menos cuatro de los siete meses que lleva el año.

A estas alturas no es un misterio el leit-motiv de HIMYM: En el año 2030, un padre (voz en off de Bob Saget) decide contarles a sus hijos como conoció a su madre. Y nos retrotrae al año 2005, cuando Ted Mosby (Josh Randor) un joven y promisorio arquitecto se entera que sus mejores amigos Marshall Erikssen, estudiante de derecho (Jason Segel) y Lily Aldrin, licenciada en arte y parvularia (Allyson Hannigan), deciden casarse después de casi una década de relación.

Esa misma tarde, en su bar favorito, Ted le comenta a su otro mejor amigo, Barney Stinson (Neil Patrick Harris) un hedonista de tomo y lomo que le gusta la buena vida, la diversión, los buenos tragos, el vestir bien y, sobre todo, el sexo casual (Barney es un especialista a la hora de llevar chicas a la cama y al día siguiente olvidarse de ellas) que el anuncio le ha hecho pensar que es el momento de sentar cabeza y dar un paso más allá en su vida, buscando a la chica indicada. Y aunque a Barney la idea del compromiso le aterra, le propone jugar al “Hola, conoces a Ted?”, es decir, presentarle a Ted a la primera chica que se le cruce. Y la escogida es Robin Sherbatsky (Cobie Smoulders), una joven canadiense que se desempeña como reportera para un pequeño canal de noticias neoyorkino.

Y ahí empieza esta historia de encuentros, rupturas, peleas, malos entendidos, éxitos, frustraciones, reuniones, flashbacks, fantasmas del pasado que nos atormentan, visiones del futuro…y todos esas cosas que suceden en eso que se conoce como la vida.

Eso, y un tremendo puñado de estrellas invitadas (Joe Mangianello, Enrique Iglesias, Britney Spears, Jennifer Lopez, Bryan Cranston, Bob Oderkink, John Lithgow, Kal Penn, Tim Gunn, Laura Prepon, Martin Short, Katy Perry, Katie Holmes y un largo etcétera)

HIMYM me llegó a gustar tanto, que entró sin más trámite a mi top 5 personal de comedias favoritas de todos los tiempos, desplazando a Friends incluso y peleando con The Big Bang Theory el número uno (TBBT tiene a su favor que aún se esté contando su historia), inclinando varias veces la balanza a su favor.

Esto se puede explicar por varios factores: el más evidente es por la simpatía de sus protagonistas. Es cierto que Ted y Robin, a la postre la pareja principal de HIMYM pueden llegar a ser un poquito irritantes a ratos, pero se compensa con la simpatía de Marshall, Lily y, sobre todo, Barney Stinson, a la larga el gran personaje de la serie, un tipo cuyo gran sentido del placer por el placer, de la irresponsabilidad y el descaro (llegando al punto de escribir verdaderos tratados como The Playbook o el “Bro Code” y de instaurar muletillas como legen….wait for it!…dary!) lograron momentos de enorme hilaridad.

Eso más la inteligencia de los guiones que, además de graciosos, fueron escritos de manera tal de que a lo largo de las nueve temporadas estuvimos más intrigados que los hijos de Ted incluso (Lindsay Fonseca y David Hernie) en saber la conclusión de la historia: como conoció a mamá? Cuando? Donde? Hubo algo entre Ted y Robin? Pregunta que forma el motivo principal de la serie, que se mantuvo hasta el final emitido en marzo de 2014.

Y considerando también que planteaba situaciones o historias que más de una vez dieron tema para reflexionar.

Pero la gran gracia de HIMYM fue su cercanía. A diferencia del entorno burgués bohemio de Friends o el mundillo de inteligencias superiores de The Big Bang Theory, las historias de HIMYM, sus chistes, sus no pocas referencias a la cultura pop son, más allá de que sean entendibles o no fuera de EEUU, se trata de situaciones que podrían afectar a cualquiera, viva en Nueva York, en Barcelona, Santiago o Hong Kong. Una cuestión de cercanía, de empatía.

Más de una vez a lo largo de la serie nos encontramos viendo una situación que nos pasó alguna vez. O que le pasó a un amigo. O que te consta que le sucedió a alguien.

A  la larga, el gran mérito de HIMYM fue celebrar la vida simplemente. Con sus pros y sus contras, con sus defectos y virtudes. Cuando caes, pero también cuando te levantas. Cuando tienes ganas de que todo se vaya al diablo, pero también cuando agradeces lo que te ha tocado. Cuando crees que estás en un abismo, pero te das cuenta que hay mucha gente dispuesta a ayudarte a salir de él.

Porque al final la vida no es sino una sucesión de pequeñas cosas, buenas, regulares y malas, pero que sabiéndolas enfocar y con la compañía adecuada pueden convertirse en grandes acontecimientos. En situaciones extraordinarias.

Como terminó siendo la vida de estos cinco amigos que compartían una mesa en el bar de abajo de su edificio. Simple y extraordinaria a la vez. Depende de uno (challenge accepted!).

Gracias por estas nueve temporadas, amigos. Que les vaya bien. Los voy a extrañar.

Brindaré por ustedes la próxima vez que vaya a McLaren’s. Será legen….(esperen un poco!)…dario!

fretamalt@hotmail.com @panchocinepata

más que una mera pintura

Tras huir de Austria y refugiarse en Estados Unidos durante los primeros años del Tercer Reich, Maria Altman (Helen Mirren) ha tenido una vida relativamente tranquila.

Sin embargo, tras la muerte de su hermana, mientras ordena las pertenencias de ésta, descubre una serie de documentos a través de los cuales la difunta pretendía recuperar las pertenencias de la familia robadas por los nazis, especialmente una colección de arte que incluye un retrato de su querida tía Adele, pintado por el renombrado e influyente pintor Gustav Klimt.

Descubriendo que existe una posibilidad de recuperar ese patrimonio, Maria contrata a Randy Schoenberg (Ryan Reynolds) un joven abogado, nieto de inmigrantes austríacos,  en cuya corta carrera se anota más decepciones que éxitos, para iniciar los trámites de rigor, mientras enfrenta los fantasmas de su propio pasado…

Es temporada de blockbusters, así que me puse las pilas con filmes que no ostentan tal calidad. Vi Danny Collins, lo mejorcito que le he visto a Al Pacino en varios años, y Map To The Stars, harto mejor que Cosmopolis y A Dangerous Method pero sigo creyendo que algo le falta a Cronenberg para volver a ser lo que era. Kurt Cobain: Montage of Heck me pareció un documental aceptable, pero innecesario si usted leyó la notable biografía escrita por Charles Cross, Heavier tan Heaven.

Así llegué a La Dama de Oro, cinta basada en el caso verídico de Maria Altman, ciudadana austríaca que debió abandonar a su familia en Viena tras la adhesión de su país al tercer Reich, y la batalla que debió enfrentar, así como muchos de sus compatriotas, para recuperar sus patrimonios personales usurpados por los nazis y luego apropiados por los gobiernos anteriormente ligados al movimiento y que nunca fueron reclamados.

Ahora bien, no es que estemos ante un filme increíble o extraordinario. La Dama..es un buen trabajo, no sobresaliente, pero cumplidor, parejo..aunque a ratos bastante plano, lo que es su gran pero. Queda la sensación que el director Simon Curtis se limitó a efectuar una labor correcta, sin sobresaltos, desaprovechando una historia a la que se le pudo sacar un jugo mejor. Curtis se queda en hacer las cosas bien y hacer cierto ruido, teniendo material de sobra para provocar un cataclismo.

En su favor hay que reconocer el buen trabajo fotográfico y de diseño, con abundantes flashbacks (algunos más necesarios que otros) y sin recurrir a la lágrima fácil, de la que suelen asistirse ciertos realizadores cuando les toca hablar del holocausto.

Es en el campo de las actuaciones donde encontramos los grandes aciertos de este filme. Principalmente por cuenta de Helen Mirren, cuya sola presencia se roba la pantalla, y cuyo talento le sube, con muchos intereses, el valor a esta película, atribuyéndole todo el mérito y el peso a una historia a la que, de no ser por Mirren, otro gallo le habría cantado.

Mirren aporta toda la solidez que la historia necesita, el poder y el atractivo a un filme que necesitaba un empujón de esta magnitud. La actuación de Mirren convence, emociona y se convierte en el gran plus de un filme donde además sus colegas Ryan Reynolds y Katie Holmes hacen algo por limpiar sus pobres desempeños y malas decisiones de filmes anteriores. Otro punto lo merece el siempre notable actor alemán Daniel Bruhl, en un papel pequeño pero que constituye un factor influyente tanto en el desarrollo de la trama, como en subir el desempeño del filme.

Bien contada, la más simple de las historias puede convertirse en una historia épica. La Dama de Oro tiene todo para convertirse en una epopeya de proporciones, pero su realizador optó por un estilo más conservador que le bajó mucho el puntaje.

Está bien pasar de curso con promedio azul, pero cuesta decir lo mismo cuando pudiendo sacarse un siete, se es feliz con el cuatro.

***

WOMAN IN GOLD

Director: Simon Curtis

Intérpretes: Helen Mirren; Ryan Reynolds; Katie Holmes; Daniel Bruhl; Tatiana Maslany; Jonathan Price

Drama

2015

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Batman vs Superman: trailer subtitulado…y un premio Eisner (update: Suicide Squad Trailer!!)

DC/Warner fueron los grandes protagonistas de la San Diego ComiCon de este año.

Si, el viernes tuvimos un muy gran panel acerca de Star Wars The Force Awakens, con presentación de los nuevos personajes y la primera reunión pública del trío protagónico original (Mark Hammill, Carrie Fischer y Harrison Ford). También tuvimos algunas presentaciones a cargo de Marvel (el teaser y el elenco de X Men Days of Apocalypse, el anuncio de Wolverine: Old Man Logan, el trailer de Deadpool y los anuncios de las apariciones de Punisher, Jessica Jones y Luke Cage dentro de Daredevil, comenzando a armar un universo Marvel para Netflix), y la confirmación de Ennio Morricone para el soundtrack de The Hateful Eight, la nueva película de Quentin Tarantino..pero fue la alianza antes mencionada la que dio los golpes más fuertes:

-El anuncio de la adaptación de Batman: The Killing Joke, dirigida por Bruce Timm para 2016 (cállese y tome mi dinero!!)

-La confirmación del plan de estrenos para los próximos años, incluyendo dos películas de la Justice League, Wonder Woman, Flash, Batman (para 2018 con Ben Affleck como director, guionista y protagonista) y Green Lantern Corps.

-Las nuevas temporadas de Arrow, Flash y las presentaciones de Supergirl y Legends of Tomorrow, como para no soltar ese público cautivo que DC ha logrado en tv.

-El trailer de Suicide Squad con la primera aparición oficial de Jared Leto como el Joker.

-Y por supuesto, el esperado segundo trailer de Batman vs Superman: Dawn of Justice…que aquí les tenemos subtitulado!!:

(todavía siguen dudando de Ben Affleck como Batman? Ah? Niños rata odia Affleck, están ahi todavía?) Y lejos la noticia que nos toca más de cerca: el premio Eisner para mejor serie limitada para Little Nemo: Return To Slumberland. Por qué nos debiera importar una serie poco conocida en Chile? Porque este cómic, escrito por Eric Shanower y basado en las tiras que a principios del siglo XX creara Windsor McKay es dibujado por Gabriel Rodríguez y coloreado por Nelson Dániel, dos ilustradores nacionales que son la punta de lanza de la invasión de artistas nacionales que se han ganado un espacio en el exigente medio independiente estadounidense.

Con casi una década de trabajo para EEUU (especialmente la pequeña pero influyente editorial IDW Publishing) Rodríguez estuvo rozando el Eisner durante todos estos años por su trabajo en Locke & Key, junto al escritor Joe Hill, mientras que Dániel ha hecho lo propio ilustrando Road Rage, miniserie escrita por, ni más ni menos, Stephen King (padre de Hill). Ahora, se puede decir con propiedad que el Eisner se mira y se toca!!

Felicitaciones a ellos desde aquí. Se lo merecen.

ACTUALIZACION: El trailer de Suicide Squad subtitulado!!

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Desahogo (reflexiones respecto de los expertos de red social)

En serio. Me cuesta entender de donde tanta mala onda con Ben Affleck. Se confirma en la San Diego ComiCon (a estas alturas el gran evento gran de la industria del entretenimiento) que habrá en 2018 un nuevo filme de Batman en solitario, protagonizado y dirigido por el mismo Affleck, quien para entonces ya habrá encarnado al murciélago en al menos dos filmes (Batman vs Superman y Suicide Squad, ambos el próximo año), confirmación de un hecho extraoficialmente anunciado hacía harto.

Y comenzó el lloriqueo. Que no sabe actuar. Que siempre tiene la misma cara. Que no tiene idea del personaje. Que la película va a ser mala. Que como director es un buen actor. Y así.

Para que decir lo que se comentó cuando la semana pasada Entertainment Weekly mostró las primeras fotos oficiales de BvS…palos iban y venían, siendo el traje de Batman el blanco predilecto (que onda, ese traje de Tortuga Ninja..llegué a leer incluso)

Donde empezó la mala onda con Affleck? Con Armageddon o Pearl Harbour? Ok, después de todo son películas de Michael Bay –cuando todavía creía ser director de cine y no un fisgón de peleas entre robots..Daredevil? Conforme, aunque creo que el director’s cut es harto mejor…esas películas que hizo cuando estaba casado con J.Lo? vale, nada que objetar…Man About Town y Hollywoodland, películas que hizo a mediados de los 2000 que nadie sabía para donde iban? Ok.

Pero si ponemos los pasos en falso de Affleck con sus aciertos, estos últimos resultan más relevantes. Partamos por sus tempranas colaboraciones con Kevin Smith (Mallrats, sobre todo Chasing Amy, Dogma, Jay & Silent Bob y la subvalorada Jersey Girl) y con su amigo Matt Damon (con todos los clichés en que podía haber caído, Good Will Hunting es un filme para nada menospreciable) y para qué hablar de sus recientes trabajos como director (Gone Baby Gone, The Town y Argo). Y qué decir de su reciente trabajo en Perdida, de la mano de David Fincher

Los aciertos de Affleck no sólo son más que sus errores, sino además tienen más contenido y más peso. Por lo que yo sigo sosteniendo lo que vengo diciendo desde que se supo que Affleck era el nuevo Batman: I BELIEVE IN BATFFLECK.

Aunque, honestamente, este desahogo no es sólo por lo que se le ha tirado a Affleck (y en cierta forma, a Jared Leto). No soy el primero, y no seré el último, que quiera desahogarse.

Desahogarme de toda esa tracalada de expertos de cartón, de críticos de red social y de especialistas de Cuevana que se han encargado de despedazar cada noticia, cada tráiler, cada foto que sale a la luz.

De un tiempo a esta parte ha aparecido una camada de personajes muy conocidos en las redes sociales (pero que aparte de su papá y de su mamá no los debe conocer nadie) que en cuanto se anuncia una nueva película de tal o cual personaje, de inmediato comienzan a encontrar lo malo. A veces con películas de las que con cueva existe la portada del guión, ya vislumbran que será un desastre.

Son adivinos? Vienen del futuro? Tienen poderes para traspasar dimensiones y ver desde mundos y realidades paralelas lo que el resto estaremos viviendo en no menos de diez meses? No lo creo. Ni aún los grandes críticos de cine que han pisado este país o cualquier otro punto del planeta (Roger Ebert, Leonard Matlin, André Bazin, Pauline Kael, Hvalimir Balic, María Romero, Héctor Soto etc) han tenido el poder de la clarividencia y lo va a tener una rata de red social.

Y por lo demás, quien les dio la chapa de expertos? Y no, juntar likes en Facebook no convierte en experto a nadie. Con suerte les alcanza para ser el guatón de la tienda de cómics de Los Simpsons.

Lo conversábamos hace unos días en el Cubil Cinéfilo (ya lo vieron? Busquen en Youtube!) y no somos los únicos que así lo planteamos. Los cinéfilos de más de 30 crecimos en una época donde ver películas era mucho más difícil. Sabías los estrenos que venían sólo porque se hacía una nota casi al pie en diarios o revistas, o porque veíamos el afiche en la entrada del cine. Para qué hablar de repetirse las películas, había que esperar que llegara al videoclub, o la pasaran por el cable…o al menos que la programara TVN o Canal 13 (Grandes Eventos, Super Premiere Universal, Best Sellers, La Película del Viernes, Tardes de Cine, Cine en su Casa eran sagrados).

Y como las disfrutábamos (y lo seguimos haciendo)

Hoy todo se ha vuelto demasiado fácil. Sabemos lo que Disney hará con Star Wars o Marvel o DC con sus personajes de aquí a los próximos cinco años y mensualmente nos informan lo que está pasando con sus proyectos. De vez en cuando sueltan una foto o teaser para hacernos picar, para hacernos caer en la ansiedad. Además, la gran mayoría de los próximos estrenos son esas cosas que muchos siempre quisimos ver tomados en serio. Ya no son los tiempos del Batman de Joel Schumacher. Nada de eso. La sci-fi, la fantasía épica, los superhéroes llegan al cine tomados en serio. Ya no es cosa de ponerle un traje brillante y ajustado a un tipo.

Para que decir las opciones para repetirse las películas: dvd, bluray, netflix, streamings, torrents y todas las fuentes extraoficiales.

En la época privilegiada en que vivimos…¿cuál es el terrible drama que les impide a estos ñatos disfrutar? ¿Qué en el mundo los motiva a encontrar, de 8 de 10 cosas que tiene una película, que son las dos cosas malas las que se imponen?

Tal vez el hecho de tener esas facilidades que he dicho antes. Ahora se sabe todo. Basta que un tramoyista suba una foto de un set de una película X para que quede la escoba. Y ahí van a aparecer estos niños rata encontrándolo todo malo. No quiero parecer un viejo de mierda, pero quizás si no tuvieran el acceso que tienen ahora a todo, sabrían apreciar mejor las cosas.

No hace mucho, el gran Simon Pegg decía que el real enemigo del reinado nerd en la industria del entretenimiento es el propio nerd. Y puede que por el momento, mientras estos subgéneros reinen sin contrapeso en la taquilla, a los estudios las críticas de estos pergenios les den lo mismo, pero a medida que estos vayan ganando influencia (y lo peor es que muchos lo están logrando) y empiecen a hacer que la gente se aleje del cine, los estudios van a decir “hasta aquí no más llegamos”. Y se acabó.

¿Irán a estar felices en ese minuto?

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Chile celebró al Joker

Estuvimos el pasado domingo en la Biblioteca de Santiago, celebrando los 75 años de la peor pesadilla de Gotham City: Chile celebraba no sólo el título de la Copa América, sino además los 75 años del Joker.

Organizada por la agrupación The Daily Gotham/Santiago Comics Zone (pueden buscarla en Facebook), y confirmando que estos eventos organizados por fans a puro corazón y ñeque resultan mucho mejores que aquellos más industriales, el domingo 5 fue el día elegido para conmemorar los tres cuartos de siglo del payaso príncipe del crimen, evento amenizado con exposiciones de fans y auspiciadores, ilustradores trabajando en vivo, exhibiciones de películas y series alusivas (varios de la fundamental Batman The Animated Series, como el imprescindible Mad Love), entre otros eventos.

Los mejores momentos tuvieron lugar en el auditorio de la biblioteca. Sebastián Castro (@xebatrocas) ofició una interesante y completa charla sobre los villanos en el cómic, cerrando, como era obvio, con el macabro psicópata de la cara blanca, pasando por monstruos como Dr. Doom, Darkseid, Thanos, Galactus…y repasando incluso aquellos villanos que presentaron una vez y que nunca más los volvimos a ver de pelmazos que eran. A continuación, el gran Hermes Antonio (@hermeselsabio) desarrolló un completo análisis respecto de la evolución del Joker en pantalla, partiendo por César Romero hasta Jared Leto, pasando por Nicholson, Hammill y Ledger.

Entre medio, el propio Joker hizo su aparición…poniendo una sonrisa en la cara de todos los asistentes. Incluso a los que no estaban del todo convencidos de hacerlo. El hombre de la sonrisa permanente se metió incluso con la actualidad nacional…y anotó en su lista negra a algunos que quisieron hacerse los vivos y tratar de robarle cámara.

Uno de los momentos más prendidos del evento vino a continuación, con el concurso de cosplay, dividido en dos secciones, la primera, protagonizada por cosplayers de villanos al azar: Bane, Acertijo, Catwoman, un producidísimo Mr. Freez (que a la postre ganaría el concurso) y una cantidad no despreciable de Harley Quinns…lo que es natural si pensamos que el festejado es su amado jefe/amante/golpeador. Y aunque no fue el ganador, un pequeño Dos Caras se robó la película, no sólo por la calidad del disfraz, sino por la personalidad con que asumía su personaje.

El broche de oro vino con la elección del cosplay alusivo al festejado, y una docena de Jokers de distintos estilos y motivaciones (series animadas, dibujado por tal o cual autor, post New 52, versión Nolan, etc). Finalmente, el vencedor resultó ser un cosplayer inspirado en el Joker vestido de enfermera de la película The Dark Knight.

Evento armado a pura pasión de los fans, dejó un sabor bastante agradable incluso para quienes no profesan la devoción por el cómic y los superhéroes. Hay que poner atención a agrupaciones como ésta, pues están en permanente actividad, organizando eventos que vale la pena visitar. Gratuitos y a fuerza del puro cariño por lo que les gusta, y más allá de las restricciones presupuestarias, son estos los eventos que a la larga se recuerdan.

fretamalt@hotmail.com  @panchocinepata