Corre el año 1901. En la región de Tierra del Fuego, en el extremo sur de Chile, el estanciero José Menéndez (Alfredo Castro) busca ampliar sus ya extensos territorios hacia el Atlántico, por lo que encomienda a Mac Lennan (Mark Staney) un retirado soldado inglés, Bill (Benjamin Westfall), mercenario estadounidense, y Segundo (Camilo Arancibia), un trabajador mestizo, para recorrer en terreno, la posible ruta.
Lo que a este trío de expedicionarios tocará atravesar en este viaje, marcará de manera indeleble sus destinos…
Fue cosa de ver nuestra presencia en los premios Goya y Platino, e incluso las nominaciones y prenominaciones al Oscar para ver el buen momento por el que pasa nuestra industria audiovisual. Y aunque los logros de La Memoria Infinita y El Conde acaparaban los titulares, injusto sería dejar afuera a Los Colonos, sólo porque le faltó un empujoncito para llegar más arriba.
Con empujón o sin él, lo cierto es que el filme de Felipe Gálvez es un trabajo que hay que agradecer, desde varios aspectos. El primero de ellos es haber hecho algo por lo que he abogado por años: el aprovechar el vasto e impresionante paisaje natural chileno como locación. Pocas veces se le ha sacado tanto partido a nuestra “loca geografía” como lo que se hace en este trabajo.
Segundo, agradecer por rescatar un episodio de nuestra historia que no siempre se cuenta…o se cuenta pero sin todos sus pros y contras, como fue la expansión del país hacia el extremo sur, sin importar el costo (especialmente humano) del proceso, que desembocó en la extinción de los pueblos originarios de la Patagonia.
El que no fue asesinado fue vendido como esclavo o expuesto en zoológicos humanos (para terminar muriendo igual por las infrahumanas condiciones de vida en que terminaban viviendo). Bueno, toda esta matanza empieza con los estancieros ganaderos que, con el visto bueno estatal, ampliaban sus dominios para hacer patria.
¿Por qué sabemos poco de esto? Quiero creer que porque la noticia principal estaba en la Pacificación de la Araucanía, otro proceso efectuado unos pocos años, que de pacífico tenía sólo el nombre.
Ahora bien, salvo por un par de secuencias puntuales, Gálvez evita que su filme, caiga en la violencia gráfica gratuita (pudo haberlo hecho, pero hubiera sacrificado ese aspecto de la historia que sí le interesaba), y opta por enfocar el proceso en el trío protagónico de esta…porque hay que llamarla de algún modo…epopeya, para tratar de entender qué es lo que puede llevar a un hombre a quitarle la vida, no a uno, sino que a comunidades enteras, sin sentir remordimiento alguno.
Dos de ellos ya saben lo que es quitarle la vida a otro, uno por deber, el otro casi por el gusto de hacerlo. Y un tercero, forzado a convertirse en cómplice pasivo de la destrucción de su propia gente. Ello, sumado a tener que recorrer un territorio inhóspito, extremo, en condiciones que desesperarían a cualquiera, y ni siquiera por su propio beneficio, sino para alguien que está cómodamente sentado en su salón, mientras ellos caminan por el borde, es para deshumanizarse.
Cinta que bebe mucho del western (estética, conceptual y hasta musicalmente), Los Colonos es un aporte no sólo como ejercicio cinematográfico, sino también por su osadía al tratar un vergonzoso momento histórico que hasta los mismos eruditos prefieren obviar. Por algo será.
***1/2
LOS COLONOS
Director: Felipe Gálvez
Intérpretes: Mark Stanley; Benjamin Westfall; Aldredo Castro; Camilo Arancibia; Sam Spruell; Marcelo Alonso
Western/Aventuras/Drama histórico
2023
Francisco.retamaltorres@gmail.com @panchocinepata (Ex Twitter/Instagram)