Ansioso de triunfar en la exigente escuela de música a la que asiste, el joven baterista de jazz Andrew Neiman (Miles Teller) practica diariamente y cuanto sea necesario para convertirse en una figura importante del medio.
Cierta noche, mientras está practicando hasta tarde en una sala de ensayo de la escuela, es sorprendido por Terence Fletcher (J.K. Simmons) uno de los directores de orquesta de la institución, quien lo escucha, para terminar ofreciéndole un cupo en su banda.
Andrew cree que por fin esta dando el paso que necesita para la grandeza, pero sin saber que será el propio Fletcher quien se volverá el mayor obstáculo que deba superar…
Las películas sobre las relaciones entre maestro y discípulo son casi siempre lo mismo: historias melodramáticas sobre un joven aprendiz con un maestro hosco y distante o, viceversa, un maestro idealista que quiere volver a un discípulo sin mayor interés en alguien de provecho. De ahí que resulte un alivio que existan películas como Whiplash que se salgan de ese molde, y nos muestren que este tipo de relaciones está lejos de ser idílica.
No puede serlo cuando los dos personajes son dos egos obsesivos que chocan y con cuática: el, joven ambicioso dispuesto a triunfar a costa de incluso de su salud física y mental, versus profesor de carácter difícil capaz de convertir en carne de gallina al más canchero, con una sola mirada. Ambos están obsesionados con la perfección, es cierto, pero desde dos puntos de vista que se enfrentan: el que quiere ejecutarla y el que quiere admirarla, pero que además tiene la oportunidad de colaborar en ella.
Queremos pensar positivamente y creer que ambos tienen las mejores intenciones. Andrew quiere ser el mejor en lo que hace y Fletcher piensa que si le ayuda a ser el mejor en lo suyo, el será a su vez uno de los grandes de su especialidad. El drama es el nivel de obsesión en los que cada uno se encuentra, lo que claramente complica que éstos dos lleguen a un objetivo que, a la larga, es un objetivo común.
Afortunadamente, el realizador Damien Chazelle evita hacer un psicoanálisis a los personajes y meterse en terrenos metafísicos (que le bajaron los bonos, por ejemplo, a El Cisne Negro, que en 2010 tocaba un argumento similar) y se conforma con contar el conflicto entre los personajes principales, que es, a todas luces, el elemento que copa el 80% de la atención –y tensión- del filme. Chazelle cuenta lo que tiene que contar, sin andarse en enredos y sin complicarse cuando no viene al caso. Lo que hace que la película funcione.
Eso por el lado del realizador, porque el mayor crédito, los principales méritos de la película, corren por su dupla protagónica. Nadie ha dudado nunca de la calidad de J.K. Simmons, pero con este personaje llega a un nivel que ni él mismo se imaginaba (y ha arrasado merecidamente con cuanto premio se le puso por delante, incluyendo un Oscar, haciéndose justicia con un intérprete que, por muy secundario que haya sido a lo largo de su carrera, siempre ha conseguido dejar su huella). Sin desmerecer a Simmons, no hay por donde hacerlo, quien sorprende aquí es el joven Miles Teller, quien se pega un giro en 180 grados respecto de los papeles que normalmente interpreta (hasta ahora ha protagonizado las adolescentes comedias Proyecto X, 21 and over, y las adaptaciones de las infumables Divergente e Insurgente, además de la próxima Fantastic Four, la única película Marvel que no ha logrado entusiasmar a casi nadie) encarnando a un tipo demasiado enfocado en lo que quiere lograr, hasta hacernos dudar de lo que persigue realmente: superarse a sí mismo en lo que hace..o sólo cerrarle la boca a todo el mundo, partiendo por su tutor.
Y con una banda sonora de pelos.
Ganadora de tres premios Oscar (actor secundario, montaje, sonido), fue nominada a Mejor Película..lo que sólo me hace odiar un poco más que ayer a la Academia por haber optado por Birdman para este premio. Que quieren que les diga, ésta me gustó mucho más.
***3/4
WHIPLASH
Director: Damien Chezelle
Intérpretes: Miles Teller; J.K. Simmons; Paul Reiser; Melissa Benoist; Paul Reiser
Drama
2014
fretamalt@hotmail.com @panchocinepata