el baile en la sangre

No sería nada de otro mundo: un grupo de delincuentes, contratados por un tal Lambert (Giancarlo Espósito) secuestrando a Abigail (Alisha Weir), la hija de un jefe criminal, como un ajuste de cuentas, debiendo llevar a la niña a una añosa mansión.

Hasta ahí todo normal, hasta que uno a uno los miembros de la banda empiezan a desaparecer…y aparecer víctimas de violentas y horrendas muertes.

Ahh, mi querido, viejo y confiable cine de terror, ese que en cada temporada nos da al menos una película hecha con más buena fe y mejores ideas que recursos, que con toda la pachorra del mundo se hace un espacio en la cartelera y de la nada termina instalándose en los recuentos de fin de año. Bueno, a estas alturas del 2024 ya tenemos uno de esos nobles ejemplares, y se llama Abigail.

Viejo, pero que aún nos puede dar grandes sorpresas, porque si bien este es un trabajo que apela al género de los vampiros (usado y abusado de lo lindo el último par de décadas) y con un punto de partida que de nuevo tiene poco (desconocidos obligados a compartir el espacio con un chupasangres, experiencia de la que no todos saldrán con vida), es el enfoque que se le da a este argumento el que marca las sanas diferencias con mucho de lo que se hace con el tema hoy por hoy.

Y tampoco es que sea un enfoque tan novedoso. Durante los primeros 25 minutos de este filme que sirve como remake espiritual de cosas como La Hija de Drácula (1931), podríamos estar ante una historia estándar de criminales muy pro, ejecutando un ilícito de gran magnitud en cuanto al hecho mismo, a sus beneficios y a sus riesgos, hasta que en un momento nos encontramos con una vuelta de tuerca que cambia todo el escenario.

Pues bien, es esa vuelta de tuerca donde los directores Matt Bettinelli-Olpiun y Tyler Gillett, cuyo respetable debut de 2019, Ready Or Not, y su trabajo como directores en las últimas dos entregas de la saga Scream les permitió ganarse la confianza de la industria y la libertad para presentarnos este proyecto, hacen gala de su ingenio y, sin darse muchas volteretas, nos meten de lleno en un festín de sangre donde ninguno de los intervinientes es tan inocente como para pensar quién de ellos podría salvarse.

Ingenio no le falta a este filme, cuyos directores hacen un buen trabajo a la hora de hacernos pasar de un tipo de relato a otro, manejando con criterio los tiempos, ritmos e intensidades, poniendo los distintos ingredientes (suspenso, acción, terror, incluso humor y la dosis justa de asco, por decirlo de algún modo) de modo que todo lo que estamos viendo siga su lógica, más allá de los cambios de registro.

Ayuda en eso un muy buen casting., afiatado y con gran química entre ellos, donde la jovencísima Alisha Weir (que hace nada estaba protagonizando el remake de Matilda, un filme nada que ver…o al menos en el papel…con éste), responsable del personaje que da título al filme, más Melissa Barrera, suerte de actriz fetiche de esta dupla de directores (viene de Scream) quienes más sacan la cara (las garras y los colmillos, en el caso de la niña) por el buen desempeño de este trabajo.

Diría que me gustaría ver más cosas como ésta a nivel de superproducciones, pero..¿para qué? Prefiero que este tipo de joyas sigan apareciendo como salen, a cuenta gotas y no muy seguido. Así no pierden su valor.

***1/2

ABIGAIL

Director: Matt Bettinelli-Olpiun; Tyler Gillett

Intérpretes: Aisha Weir; Melissa Barrera; Dan Stevens; Kathryn Newton; Matthew Goode; Kevin Durand; Giancarlo Esposito

Terror

2024

Francisco.retamaltorres@gmail.com  @panchocinepata (Ex Twitter, Instagram)